A Pau García Milá lo encontramos brevemente en 2010, cuando era una joven figura del emprendimiento. Había lanzado EyeOS, un sistema que permitía que cualquier aplicación funcionara en un navegador web, y había sido elogiado por dos entidades destacadas: el MIT y la Fundació Princesa de Girona. Perdí su rastro hasta que hace poco más de un año comenzamos a verlo abogar intensamente por la divulgación de temas innovadores en redes sociales, utilizando su formato de vídeos de un minuto. Ha establecido Founderz, una escuela enfocada en programas sobre temas actuales como la ciberseguridad o la Inteligencia Artificial, con la que logró forjar una alianza vital con Microsoft.
Vamos a conversar sobre emprendimiento, tanto individual como en pareja, y a inspirarnos hablando sobre herramientas de Inteligencia Artificial generativa.
⭐Patrocinador del programa M4C Academy
Entrevista a Pau Garcia-Milà (Founderz)
5:14 Cuéntanos qué era EyeOS y cómo ha evolucionado
EyeOS es un sistema para virtualizar aplicaciones en un motor completamente web. Justo vivimos la transición hacia el estándar HTML5 y a lo que hoy consideramos web, algo que cuando empezamos no existía.
Básicamente, permitía utilizar cualquier aplicación, ya fuera Windows, Mac o Linux, en un navegador, desde Office hasta softwares avanzados como AutoCAD, programas de 3D, entre otros. Podíamos cargarlo y usarlo desde cualquier computadora y también recuperar toda la información. Esta era la concepción de la nube, años antes de que se generalizara.
Al principio, era un proyecto de software libre. Publicábamos en SourceForge, una página que tuvo éxito antes que GitHub, y además, desarrollamos un modelo de negocio basado en servicios para empresas, pero era completamente B2B. Siempre colaboramos con empresas.
Desde el punto de vista tecnológico, EyeOS fue algo muy robusto, ya que hicimos algunas contribuciones al nivel de open source a librerías que aún hoy cuentan con parte de ese código. Sin embargo, desde el aspecto comercial, nos resultó complicado encontrar el motivo por el cual una empresa debería pagarnos, dado que era un software gratuito. De hecho, existían empresas que prosperaban más que nosotros vendiendo soporte de nuestro software en sus países, y aunque nosotros también lo hacíamos, se percibía que el creador del software debía ser más costoso.
Antes de vender EyeOS a Telefónica, logramos formar un equipo compuesto en su mayoría por ingenieros, con alrededor de 40 personas. Cuando entró Telefónica, yo me retiré porque ya había un CEO, que de hecho, me había reemplazado hace tiempo.
12:18 Te otorgaron el premio del MIT como Innovador del Año en 2011 y el FPdGI Princesa de Girona (2010). En esa época, experimentaste un aumento significativo de popularidad. ¿Cómo manejaste esta situación?
Sin restar mérito, estos fueron dos premios cuyos significados han cambiado bastante desde el año en que los recibí. Fui galardonado durante el primer año del Princesa de Girona, lo cual es un gran honor, pero al mismo tiempo, nadie se presentó, ya que no existía. Hoy, cuando recomiendo a alguien como premiado, veo todos los formularios y lo complicado que es ganar, me siento afortunado. Me lo otorgaron en 2010, cuando el ecosistema emprendedor no era nada parecido al de hoy.
en época y éramos considerablemente menos.
Siempre afirmo que este tipo de distinciones transforman tu vida a largo plazo, pero no pueden hacerte olvidar la realidad. Es decir, es un evento espectacular que se lleva a cabo un jueves, estás con los monarcas, te toman fotografías, tienes la atención de todas las televisiones y revistas, pero al día siguiente es viernes y si le fallas a un cliente o una entrega, se va a enfadar. Hoy, gracias a estos galardones, han surgido algunas oportunidades que hubieran sido más complicadas sin ese reconocimiento a nivel profesional.
La verdad es que ha sido muy genial, cuando han existido proyectos que no han prosperado, este tipo de asociaciones te ofrecen mucho apoyo. Inclusive por la salud mental, que a veces se ignora en gran medida al hablar de emprender. Se forma una familia de galardonados.
13:35 En medio, en 2011 lanzaste bananity, recuerdo aquella red social, de la campaña con Andreu Buenafuente. ¿Qué buscas y qué ocurrió con el proyecto?
Bananity se encontraba entre Idea Foster y Founderz, el proyecto actual. De hecho, desde EyeOS he participado en varios proyectos más. Bananity, fue una red social para recomendar cosas buenas y malas. Algo que fue muy interesante a nivel tecnológico, pero no tuvo éxito y tuvimos que clausurarlo. Además, no prosperó en una época en la que cosas similares sí habían tenido éxito, lo que es una buena lección de humildad.
Posteriormente, creamos otra aplicación donde redefinimos ese éxito y fracaso para nosotros, que era una aplicación para preservar los recuerdos de los primeros años de vida de los bebés. Esta empresa fracasó, ya que teníamos aproximadamente 50.000 usuarios y ninguno de ellos era de pago.
También hemos enfrentado fracasos, por ejemplo, Napsis, un proyecto que nunca llegó a realizarse, que era un sistema de automatización de viviendas. Le hablabas a un dispositivo y te encendía las luces y demás. Que te suena que es Alexa o Siri, pero antes que Alexa o Siri. En este caso, no queríamos adentrarnos en un mercado donde ya nacíamos en desventaja, ya que hubiéramos competido contra gigantes y decidimos cerrarlo antes de comenzar.
Empezamos IdeaFoster, que terminó siendo vendida y fue un gran éxito. Una de las empresas de los mayores grupos de inversión del planeta, Opera Beta Witty, nos compró y funcionó muy bien. IdeaFoster es una empresa que se dedica a prototipar modelos de negocio disruptivos para grandes corporaciones, normalmente multinacionales. Creé el producto propio IdeaFoster, destinado a la innovación ágil que ofrecíamos a nuestros clientes. En 2018, Cambia, que es parte de AT International, uno de los mayores fondos de Opera Beta Witty del mundo, nos adquirió. Al cabo de dos años, Ana y yo salimos de IdeaFoster con la transición al nuevo CEO, Ankit Balani, y comenzamos Founderz, que es el proyecto en el que estamos actualmente, y es el más grande del cual he sido cofundador.
27:30 Y finalmente, surge Founderz ¿Cómo fue el inicio de este proyecto?
Founderz fue una idea unida a un nombre. Hicimos algo que creo que estuvo mal, pero nos encantó. Años antes de fundar Founderz, adquirimos el dominio y fue el más caro que he comprado, pagamos dos mil o tres mil euros.
Cuando comenzamos la idea de desarrollar un proyecto sobre temas de emprendimiento, en ese momento lo llamamos escuela digital, nos gustó mucho Founderz, pero no tanto por su significado (fundadores), sino por ser aquellos que inician una nueva profesión.Al poco tiempo comenzamos a enfocarnos en carreras del mañana, desarrollando programas dirigidos a adultos, especialmente a personas de treinta, cuarenta y cincuenta años, ya sea con familia o sin ella, pero que desean formarse, y descubrimos que existía un nicho interesante por explorar. Se trató de la educación profesional de individuos que deseaban capacitarse en temas innovadores, aunque su vida presentara desafíos.
Estuvimos un año y medio desarrollando una plataforma distinta, colaborativa, que de alguna manera facilita la conexión con otras personas que están realizando el mismo programa que tú. Hace un año, contactamos a Microsoft y les propusimos iniciar un programa de inteligencia artificial y, para nuestra sorpresa, aceptaron, justo cuando se lanzó ChatGPT.
En la actualidad, contamos con casi 9.000 estudiantes en todo el planeta y hemos evolucionado de ser un socio nacional, únicamente en España, a uno regional, en Europa Occidental, y luego a convertirse en socio mundial de educación de Microsoft, comenzando a lanzar programas. Hemos transicionado de ser una startup que no generaba ingresos hace dos años a ser rentable, con un equipo de 45 personas y un crecimiento significativo.
30:42 ¿Qué implica, por ejemplo, que un programa de Founderz se realice en colaboración con Microsoft? ¿Proporcionan docentes? ¿Colaboran en el desarrollo del programa?
La colaboración es bastante integral, trabajamos conjuntamente para que tenga coherencia, la mitad del programa es técnico y enseñamos a utilizar varias herramientas de Microsoft. También hay módulos en los que no quisieron participar, como por ejemplo, el de Ética y regulación, que no enviamos para su validación.
Además, existe una parte de colaboración posterior, trabajamos mucho entre nuestros equipos en cuestiones de educación, IA, entre otros. Hemos logrado llegar a más países de Microsoft, como Portugal, Noruega y Estados Unidos, para continuar expandiendo el programa. Hemos estado grabando en la sede central de Microsoft varias partes del programa. Asimismo, hay una doble certificación, una de Founderz en colaboración con Microsoft y otra es una certificación tecnológica oficial que emite Microsoft, la DP-900, que es el primer nivel de entrada a todas sus certificaciones tecnológicas.
Founderz se creó más desde una perspectiva de posición. No realizamos un estudio de mercado, porque nuestra intención era ofrecer programas que fueran accesibles para la mayoría, no solo para una minoría, como ocurre en las escuelas de negocios tradicionales.
Queríamos que la mayoría pudiera financiarlo, ya sea pagando de una sola vez o en cuotas, y que aquellos que aún no pudieran, contaran con opciones de financiamiento. En España, tenemos dos importantes acuerdos para becas, con la fundación princesa de Girona y la fundación 11, cubriendo el 50% y el 100% del costo. Además, el precio del programa incluye un voucher para realizar el examen oficial, que tiene un costo adicional de 100 euros.
Contamos con clases grabadas para aquellos que no pueden asistir a varias sesiones, por ejemplo, el director general de IA de Microsoft a nivel global, que grabamos con un equipo cinematográfico de alta calidad. Ofrecemos sesiones semanales síncronas, desde Meetups hasta Masterclass, cuando hay novedades, y también una parte de colaboración asíncrona con los alumnos para registrar su actividad, trabajos parciales, entre otros.
Es un programa sumamente colaborativo que respeta la diversidad de horarios y preferencias de los participantes. Si se requieren cuatro o cinco horas semanales de dedicación, habrá quienes prefieran hacerlo en las mañanas del sábado o quienes destinen media hora cada noche. Hemos intentado salvaguardar ese aspecto, sin dejar de lado la calidad del contenido.
a la sección en directo.
42:32 Como te seguimos en TikTok sabemos que eres un entusiasta de la IA y tus vídeos de un minuto fueron tu regreso a la acción.
Inicié en TikTok por casualidad, porque tenía ganas de comunicarme y crear este tipo de vídeos. Pensaba “haré uno y si resulta mal lo dejaré”, pero tuvo éxito, así que realicé otro y también le fue bien, comenzando a crecer a una velocidad que jamás había experimentado. Comencé a principios de 2021 y para 2022 contaba con aproximadamente 206 millones de visualizaciones, algo que nunca había conseguido en mi vida.
Actualmente, no ceso de crecer, llegando al punto en que tengo una comunidad que envía información que descubro, para compartir en mi canal. Esto me ha beneficiado, por ejemplo, con el podcast Emprendiendo en pareja, evitamos la travesía por el desierto, que son los primeros capítulos de un podcast, los cuales suelen ser arduos, y nuestro episodio inaugural alcanzó 100.000 visualizaciones en YouTube.
Los canales que ofrecen mejor rendimiento para estos vídeos en términos de engagement serían TikTok, LinkedIn y YouTube, aunque en cuanto a seguidores, TikTok destaca con casi un millón de seguidores; YouTube, con cerca de 300.000; y LinkedIn, con alrededor de 60.000.
49:14 Mencionas que la IA es la «kriptonita del mercado» y que no implementarla en las empresas es perder una oportunidad. ¿Podrías ahondar en esta noción?
Considero que la IA es una revolución única en comparación con otras innovaciones que hemos presenciado en el pasado. Ha existido una serie de tecnologías muy robustas, algunas de las cuales encontrarán su lugar y utilidad en el futuro, pero que aún no tienen aplicaciones definidas, como el metaverso o blockchain. La IA se presenta como algo diferente, ha superado esa etapa de incertidumbre y no hay nadie que nos obligue a adoptar su uso, pero si no lo hacemos, la competencia lo hará.
Las IA que utilizo diariamente incluyen ChatGPT, Azure IA (la plataforma de Microsoft en la nube que permite acceder a servicios de OpenAI a través de APIs), OpenAI Service, para la parte más corporativa Bing y Bing Chat, y para las imágenes DALLE-3. Mixo, Flicky y Tome, tres aplicaciones para realizar prototipos de sitios web, presentaciones y vídeos.
