Google enfrenta una acción legal colectiva, presentada en un tribunal de California, Estados Unidos, ya que se le acusa de apropiar y explotar de manera inapropiada los datos personales de sus usuarios para capacitar sus productos fundamentados en IA.
Ocho individuos interpusieron en la justicia federal de San Francisco la acción legal con el propósito de ser la representación de millones de internautas. La demanda se dirige tanto a Google como a su corporación matriz Alphabet y a DeepMind, la filial de IA del coloso tecnológico. En ella se sostiene que Google infringió sus derechos de privacidad y propiedad al hacer uso del contenido que publicaron en sus redes sociales y la información difundida en las plataformas de Google. Todo con el objetivo de capacitar su chatbot Bard y otros sistemas con IA.
«Google no posee Internet, no es propietario de nuestras obras creativas, no es dueño de nuestras expresiones individuales, imágenes de nuestras familias e hijos, o cualquier otra cosa únicamente porque la compartimos en línea», manifestó el abogado de los demandantes, Ryan Clarkson, en un comunicado.
La prueba presentada en la demanda abarca contenido en formato de imágenes, sitios web de citas, listas de reproducción musical y vídeos de TikTok. De hecho, uno de los demandantes, que se identifica como JL, es un autor y periodista de información; asegura que Google replicó uno de sus libros en su totalidad solo para entrenar a Bard.
Qué dice Google
La consejera general de Google, Halimah DeLaine Prado, declaró que la compañía ha sido clara en su práctica de utilizar datos de fuentes públicas, como información accesible en la web abierta y conjuntos de datos públicos. Y que esto nunca ha sido un secreto, usándose, por ejemplo, para capacitar los modelos de inteligencia artificial que respaldan servicios como Google Translate.
Según Prado, esta práctica se lleva a cabo de forma responsable y conforme a los Principios de IA establecidos por Google. Estos principios buscan asegurar que el uso de datos sea ético y respete las normas de privacidad y protección de la información personal.
La Sentencia Warhol podría establecer precedentes
Esta no es la primera ocasión en que se discute cómo las IA pueden enfrentar cuestiones legales. La Sentencia Warhol, dictada por el Tribunal Supremo de Estados Unidos el 18 de mayo de 2023, causó un impacto relevante en el ámbito del arte y la inteligencia artificial.
La sentencia aludía a la obra «Prince Orange» de Andy Warhol, que se fundamentó en una fotografía tomada por Lynn Goldsmith sin su permiso. Todo el dilema planteó interrogantes sobre la aplicación de la IA para generar imágenes y obras derivadas, ya que modificaciones menores podrían no ser vistas como transformaciones suficientes.
Esta sentencia podría tener repercusiones para la defensa legal de herramientas de inteligencia artificial como Midjourney y Stable Diffusion, generando incertidumbre en el campo de la autoría y los derechos de autor en obras generadas por IA.
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